Esta aplicación nació en 2013 de la mano de los hermanos rusos Nikolái y Pavel Durov como una alternativa a WhatsApp. Este servicio de mensajería disfruta de una popularidad destacada en Brasil (38%), México (34%) e Italia (32%), según la empresa de análisis de datos Statista.
950
millones de usuarios tenía la app en julio de 2024, convirtiéndolo en el cuarto servicio de mensajería más popular en el mundo.
El cifrado de extremo a extremo convirtió a Telegram en una herramienta popular para actos ilegales como el tráfico de drogas, venta de armas y explotación infantil. Pese a sus promesas de privacidad, existen casos de hackeos y filtraciones de datos en canales de la app. Empresas y personas han utilizado Telegram para realizar transacciones financieras de manera oculta, al evadir impuestos
y regulaciones.
Uno de los escándalos recientes en Corea del Sur es la difusión de contenido sexual no consentido de mujeres jóvenes y niñas, compartido en el 70% de las escuelas.
Telegram fue bloqueado temporalmente en España en marzo de 2023 por difundir contenido protegido por derechos de autor. Actualmente, la app ya está disponible.
Según órganos de inteligencia, los grupos como Proud Boys y Qanon han recurrido a la app para organizar manifestaciones y vender armas y drogas ilegales en Estados Unidos.
La filtración de conversaciones en Telegram entre Sergio Moro y fiscales de la Operación Lava Jato desató un escándalo en Brasil, al cuestionar la legalidad de la operación.
En 2018, el gobierno ruso intentó bloquear Telegram por negarse a entregar las claves de cifrado para permitir la vigilancia de las comunicaciones, lo que ocasionó protestas en el país.
El 24 de agosto, Pavel Durov, fundador de Telegram, fue arrestado en el aeropuerto de Le Bourget, cerca de París. La justicia francesa considera que su negativa a cooperar con las fuerzas del orden lo convierte en cómplice de actividades ilegales en Telegram, que incluyen tráfico de drogas, difusión de pornografía infantil,fraude y estafa.